Hechos 4:12

Pues debajo del cielo no hay otro nombre (Jesucristo) dado a los hombres, por medio del cual podemos salvarnos.

1ª Carta de San Pedro 2:4   

Al acercarse a Jesucristo, como a piedra viva, rechazada ciertamente por los hombres, más para Dios escogida y preciosa, también vosotros, cual piedras vivas, edificaos sobre Él, como casa espiritual para un sacerdocio santo, a fin de ofrecer sacrificios espirituales, agradables a Dios por Jesucristo.

Por lo cual se halla esto en la Escritura: He aquí que pongo en Sión una piedra angular escogida y preciosa; y el que en ella cree nunca será confundido. Preciosa para vosotros los que creéis; más para los que no creen, la piedra que rechazaron los constructores, ésa misma ha venido a ser cabeza de ángulo y roca de tropiezo y piedra de escándalo; para aquellos que tropiezan por no creer a la Palabra, a lo cual en realidad están destinados.

Pero vosotros sois un linaje escogido, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo conquistado, para que anunciéis las grandezas de Aquel que de las tinieblas os ha llamado a su admirable luz; a los en un tiempo eran llamados “no pueblo”, ahora se les llama pueblo de Dios; y a los que antes eran llamados “no más misericordia”, ahora se les llama “objeto de la misericordia”.

2ª Carta de San Pedro 2:20

Porque si los que se desligaron de las contaminaciones del mundo desde que conocieron al Señor y Salvador Jesucristo se dejan de nuevo enredar en ellas y son vencidos, su postrero estado ha venido a ser peor que el primero. Mejor les fuera no haber conocido el camino de la justicia que renegar, después de conocerlo, el santo mandato que les fue transmitido. En ellos se ha cumplido lo que expresa con verdad el dicho: “Un perro que vuelve a lo que vomitó” y “una puerca lavada que va a revolcarse en el fango”.

San Juan 14:21

El que tiene mis mandamientos y los conserva, ése es el que me ama; y quien me ama, será amado de mi Padre, y Yo también lo amaré, y me manifestaré a él. Díjole Judas, no el Iscariote: Señor, ¿cómo es eso: que te has de manifestar a nosotros y no al mundo? Jesús le respondió y dijo: Si alguno me ama, guardará mi Palabra, y mi Padre lo amará, y vendremos a él, y en él haremos morada. El que no me ama, no guardará mis Palabras; y la Palabra que estáis oyendo no es mía, sino del Padre que me envió.

San Mateo 12:32

Y si alguno habla contra el Hijo del Hombre, esto le será perdonado; pero al que hablare contra el Espíritu Santo, no le será perdonado ni en este siglo ni en el venidero.

Apocalipsis 20:6

¡Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección! Sobre éstos no tiene poder la segunda muerte, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, con el cual reinarán los mil años.

Apocalipsis 22:14

Dichosos los que lavan sus vestiduras para tener derecho al árbol de la vida y a entrar en la ciudad por las puertas. ¡Fuera los perros, los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras y todo el que ama y obra mentira! Yo, Jesús, envié a mi ángel a daros testimonio de estas cosas sobre las Iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella esplendorosa y matutina”. Y el Espíritu y la novia dicen: “Ven”. Diga también quien escucha: “Ven”.

1ª Carta de San Juan 2:3

Y en esto sabemos si le conocemos: si guardamos sus mandamientos. Quien dice que le ha conocido y no guarda sus mandamientos, es un mentiroso, y la verdad no está en él; mas quien guarda su palabra, verdaderamente el amor de Dios es en él perfecto.

Hechos 5:29

A lo cual respondieron Pedro y los apóstoles: Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres.

Nota: San Pedro, llenó de Espíritu Santo, afirmó en Hechos 4:12 que Jesucristo es el único Redentor, único Salvador de la humanidad.

Catecismo Romano. 741. Por esto, aunque debemos confesar que se nos ha propuesto por medianero único a Cristo Señor Nuestro, como quien solo nos reconcilió por medio de su sangre con el Padre Celestial, y que habiendo hallado la eterna Redención y una vez entrado en el santuario, nunca cesa de interponerse por nosotros, con todo en manera ninguna se sigue de ahí que no podamos acogernos a la gracia de los Santos.

No hay ningún otro nombre fuera de Jesucristo que pueda salvar a los hombres de sus pecados. Quien afirme otra cosa, no le consideréis Católico. Algunos, con el falso espíritu de Asís, afirman con engaño que la Santísima Virgen es corredentora, es evidente que la fe de estos está plagada de herejías, y que su fe no es Católica. Todo aquel que no crea que Jesucristo es el único Dios, y el único Redentor, morirá en su pecados y está renunciando a su Salvación. Debemos y podemos, aparte, acogernos a las gracias de los Santos, y a las gracias de Nuestra Santísima Señora, pero la fe de nuestro bautismo dice que tenemos un solo nombre, el de Jesucristo, para la Salvación de todas las almas.

Los que tropiezan con la Sagrada Palabra de Dios, es decir, los que no creen en la Palabra, los que se muestran indiferentes a la Palabra o los que maliciosamente protestan sobre ella y le dan un falso significado, que es un falso testimonio sobre Dios, todos estos en realidad no saben que han sido destinados a ello.

Vosotros los bautizados, vosotros los consagrados con nuestro Señor Jesucristo, con nuestra Señora la Santísima Virgen María y con San José, vosotros los que guardáis la Sagrada Palabra de Dios y camináis con ella, a vosotros se refiere como linaje escogido, sacerdocio real y una nación santa.

En Portugal se conservará siempre el dogma de la Fe, nos dijo la Santísima Virgen en Fátima, Portugal. Esa es la nación santa, cuyos ciudadanos son todos los que llevan en sus corazones a Nuestra Señora y hacen lo que ella pide (haced lo que ella os pida). Dios nos ha revelado su Plan de Salvación, primero a través de sus Profetas, después mediante su Hijo Jesucristo, y ahora lo hace con su Santísima Madre, Esposa de su Santísimo Espíritu y Reina de todo lo creado. Buscad a Nuestra Señora, el triunfo de su Inmaculado Corazón ella misma lo ha garantizado en Fátima, y ella os conducirá a la Salvación.

Todos los pecados con arrepentimiento, verdadera contrición y confesión pueden ser perdonados, pero todo aquel blasfeme contra el Espíritu Santo no será perdonado aquí. Si queréis, tenéis vuestra Salvación en vuestras manos, pero si rechazáis con total conocimiento y voluntad los dogmas de la fe Católica Tradicional, e ignoráis vuestras obligaciones diarias con vuestro Señor y vuestra Señora, verdaderamente estáis renunciando a vuestra Santificación y a vuestra Salvación, y este pecado no será perdonado aquí.  

El discernimiento de un Católico debe priorizar siempre, ante la duda, en obedecer primero la Doctrina Católica que procede de Dios, antes que a esos falsos pastores (educadores, sacerdotes, monitores…) con sus falsas enseñanzas y la falsa obediencia que pretenden.

Cristo padeció por el pecado original y por los actuales. Los que le ofenden le crucifican de nuevo. Algunos afirman conocerle, y al negarle con las obras, parece que ponen sus manos violentas sobre él.

Herejía: Es una actitud persistente de rechazo a la Verdad revelada por Dios, nuestro Señor. Es la negación o la duda acerca de una o varias verdades fundamentales de la fe Católica. Este pecado supone la excomunión de la Iglesia.

1

San Mateo 28:18

Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Todo poder me ha sido dado en el cielo y sobre la tierra. Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles a conservar todo cuanto os he mandado. Y mirad que Yo con vosotros estoy todos los días, hasta la consumación del mundo.

2ª Carta de San Pablo a los Corintios 11:3

Temo que, como la serpiente engañó a Eva con su astucia, así vuestras mentes degeneren de la simplicidad y pureza que han de tener con Cristo. Porque si alguno viene y predica otro Jesús que al que nosotros hemos predicado, o si recibís otro Espíritu que el que recibisteis, u otro Evangelio que el que abrazasteis, bien lo toleraríais.

San Juan 5:43

Yo (Jesucristo) he venido en el nombre de mi Padre, y no me recibís; si otro viniere en su propio nombre, ¡a ése lo recibiréis!

San Mateo 24:24

Y si aquellos días no fueran acortados, nadie se salvaría; más por razón de los elegidos serán acortados esos días. Si entonces os dicen: Ved, el Cristo está aquí o allá, no lo creáis. Porque surgirán falsos Cristos y falsos profetas, y harán cosas estupendas y prodigios, hasta el punto de desviar, si fuera posible, aún a los elegidos.

2ª Carta de San Pablo a los Tesalonicenses 2

Nadie os engañe en manera alguna, porque primero debe venir la apostasía y hacerse manifiesto el hombre de iniquidad, el hijo de perdición; el adversario, el que se ensalza sobre todo lo que se llama Dios o sagrado, hasta sentarse el mismo en el templo de Dios, ostentándole como si fuera Dios. ¿No os acordáis que estando yo todavía con vosotros os decía estas cosas? Y ahora ya sabéis qué es lo que le detiene para que su manifestación sea a su debido tiempo. El misterio de la iniquidad ya está obrando ciertamente, sólo hay el que ahora detiene hasta que aparezca de en medio. Y entonces se hará manifiesto el inicuo, a quien el Señor Jesús matará con el aliento de su boca y destruirá con la manifestación de su Parusía;

Aquel inicuo, cuya aparición es obra de satanás con todo poder y señales y prodigios de mentira, y con toda seducción de iniquidad para los que han de perderse en retribución de no haber aceptado para su Salvación el amor de la Verdad. Y por esto Dios les envía poderes de engaño, a fin de que crean la mentira, para que sean juzgados todos aquellos incrédulos a la Verdad, los cuales se complacen en la injusticia.

Apocalipsis 13:8

Y lo adorarán al dragón todos los moradores de la tierra, aquellos cuyos nombres no están escritos, desde la fundación del mundo, en el libro de la vida del Cordero inmolado.

Nota: Se refiere a las falsas enseñanzas diabólicas vaciadas de Jesucristo de los seguidores del inválido Concilio Vaticano II, que obran en total apostasía, cometiendo todo tipo de sacrilegios, difundiendo falsas enseñanzas plagadas de herejías y blasfemias, y llevan un falso evangelio sodomita que conduce a la condenación de las almas. Estos rechazan con desprecio los mandatos del Señor, como bautizar y enseñar a todos los pueblos, que podría salvar a las almas, por ello todos sus actos son inválidos.

Antes recibiréis a falsos Cristos, como a Juan Pablo II, que se autodenominó Cristo, sin serlo. Antes recibiréis sus heréticas enseñanzas, en las que afirma que los otros cultos conducen a Dios, lo que verdaderamente sigue originando el extravío y la perdición de muchísimas almas… Antes recibiréis a falsos Cristos, con el espíritu del anticristo, que recibiréis al propio Jesucristo, verdadero y único Creador y Redentor de la humanidad, que ha venido con la Verdad de la Palabra del Padre, y pocos la guardan y caminan según ella.

Si viene otro en su propio nombre como Juan Pablo II, con su propias verdades, con sus verdades últimas y definitivas, según dijo, que son grandes mentiras que no han sido reveladas por Dios Santo, a ese otro que no lleva el Evangelio de Jesucristo, a ese otro si lo recibís. A ese otro que os llamó a todos Cristo, y no lo sois, porque solo uno es Cristo Nuestro Señor, a ese otro que se exaltó en el lugar Santo sobre todas las cosas, predicando otro Evangelio, a ese otro que dió un falso testimonio de la Revelación de Dios, a ese otro lo recibís con las manos abiertas, y lo acogéis en vuestro corazón con mucho agrado y devoción, desechando al Santo Espíritu de Dios en su Santa Palabra. Todo el Magisterio de la Iglesia durante 2.000 años despreciado por Juan Pablo II en unos minutos.

La Santísima Virgen profetizó en La Salette que la Iglesia sería eclipsada. La falsa predicación de Juan Pablo II, que no era católico, arrastró fuera de la Iglesia y eclipsó a la mayor parte de los católicos, al celebrar juntos que hay salvación en otros cultos fuera de Jesús, celebrándolo sus seguidores con gran jubileo hasta nuestros días. Juan Pablo II promovió la apostasía, la adoración de demonios y la total idolatría, sometiendo a una humillación y burla extrema a nuestro Señor Santísimo, al promover por igual el culto a demonios y a Dios Santísimo, para mayor deleite y gozo de sus seguidores. Los que eligieron la liberación de Barrabás, que se queden con Barrabás, los pocos que eligieron a Cristo, heredarán con Cristo, pero no llaméis católicos a todos estos, porque no lo son. Se denominan a si mismos católicos pero no los son, ese es su engaño.

El Señor nos recuerda constantemente el fuego eterno destinado para los que pecan mortalmente sin arrepentirse. Es eterno el castigo del Señor, porque así es el dolor que le ocasiona el pecado del impenitente, ya que su dolor no es solo por el calvario, crucifixión y muerte, sino que es un dolor que traspasa los tiempos, motivado por la indiferencia y desprecio que tienen muchos por la salvación que nos ofrece, especialmente de aquellos bautizados a los que más ayuda. Promover y seguir las falsas enseñanzas heréticas, la apostasía y la idolatría es absolutamente malvado y Dios lo castiga con el infierno. ¿Cómo vais a devolver el infinito amor con que os ama vuestro Creador y Redentor? ¿Con indiferencia, desprecio y maldades? Si continuáis pecando contra Dios, no podréis doblegar su justicia cuando finalicen vuestros días aquí, será tarde.

Estos herejes de la secta conciliar, ya no necesitan de la crucifixión y muerte de Nuestro Señor Jesucristo, de su sacrificio, para la Salvación de las almas. Desde su comienzo han defendido que hay Salvación fuera de Nuestro Señor, en otro cultos, por ello, conviven con la Abominación Desoladora, se han suspendido del sacrificio perpetuo, y beben, sin saberlo, del cáliz de la ira de Dios, de la copa de su condenación. En total rebeldía, ellos mismos expanden la idolatría, aborrecida por Dios, por todo el mundo, prefieren adorar ídolos y demonios que adorar a Dios Santísimo, y ello les conduce a la condenación de sus almas.

También se refiere a los falsos profetas de cualquier culto, que no buscan las Gloria de Dios con sus enseñanzas, sino que buscan su propia Gloria. Hay una única Religión y una única Iglesia, la Católica, y fuera de ella todo son tinieblas y no hay Salvación.

Aquellos que se complacen en el engaño, en lo superficial, en lo aparente, todos los que prefieren antes la mentira que la Verdad de la Palabra de Dios, aquellos que no profundizan y no caminan según el amor a su Palabra, todos estos están despreciando su propia Salvación, que conseguirían si lograsen creer y caminar según la Palabra de Dios. Todos estos que aman el engaño y la mentira más que la Verdad revelada por Jesucristo, ya han renunciado a su Salvación.

El Señor insiste en afirmar en que pocos se salvan: Y si aquellos días no fueran acortados, nadie se salvaría. Los falsos líderes Católicos, contradiciendo a Dios, para extravío de las almas que los siguen, afirman lo contrario: todos se salvan, otros cultos conducen a Dios, el infierno está vacío… La falsa predicación del espíritu del anticristo busca una única religión mundial, vacía de la doctrina de Jesucristo, así la reconoceréis. El espíritu del anticristo (satanás), en oposición a Cristo, ha venido para liberar a las almas de los mandatos y sacramentos de Dios, ya que implícitamente, al predicar falsamente la salvación desde cualquier culto, hace innecesario mantener las verdaderas obligaciones cristianas hacia con Dios, ya que los otros cultos no podrían cumplirlos. Una terrorífica predicación diabólica. 

La gran tribulación se ha producido en el seno de la Iglesia en la tierra, cuando el espíritu del anticristo, el falso pastor Católico, enemigo de Dios, se ha sentado y ha sido adorado en el lugar Santo por la mayoría de los llamados a si mismos católicos, y por muchos de otros cultos. Los nombres de estos no aparecerán escritos en el libro de la Vida de Jesucristo, el cordero de Dios, y perecerán por su infidelidad a Dios.

2

Isaías 7:14 Antiguo Testamento

Por tanto el Señor mismo os dará una señal: He aquí que la Virgen concebirá y dará a luz un Hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel.

Miqueas 5:2 Antiguo Testamento

Pero tú, Belén de Efrata, pequeña para figurar entre los millares de Judá, de ti me saldrá el que ha de ser dominador de Israel, cuyos orígenes son desde los tiempos antiguos, desde los días de la eternidad.

San Lucas 1:26

Al sexto mes, el ángel Gabriel fué enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una Virgen prometida en matrimonio a un varón, de nombre José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María. Y entrado donde ella estaba, le dijo: Salve, llena de gracia; el Señor es contigo. Al oír estas Palabras, se turbó, y se preguntaba qué podría significar este saludo. Mas el ángel le dijo: No temas, María, porque has hallado gracia cerca de Dios. He aquí que vas a concebir en tu seno, y darás a luz un Hijo, y le pondrás por nombre Jesús. El será grande y será llamado el Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su Padre, y reinará sobre la casa de Jacob por los siglos, y su, reinado no tendrá fin. Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será eso, pues no conozco varón? El ángel le respondió y dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la virtud del Altísimo te cubrirá; por eso el santo Ser que nacerá será llamado Hijo de Dios. Y he aquí que tu parienta Isabel, en su vejez también ha concebido un hijo, y está en su sexto mes la que era llamada estéril; porque no hay nada imposible para Dios. Entonces María dijo: He aquí la esclava del Señor: Séame hecho según tu Palabra. Y el ángel la dejó.

En aquellos días, María se levantó y fué apresuradamente a la montaña, a una ciudad de Judá; y entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel. Y sucedió cuando Isabel oyó el saludo de María, que el niño dio saltos en su seno e Isabel quedó llena del Espíritu Santo. Y exclamó en alta voz y dijo: ¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu seno! ¿Y de dónde me viene, que la Madre de mi Señor venga a mí? Pues, desde el mismo instante en que tu saludo sonó en mis oídos, el hijo saltó de gozo en mi seno. Y dichosa la que creyó, porque tendrá cumplimiento lo que se le dijo de parte del Señor”. Y María dijo: Glorifica mi alma al Señor y mi espíritu se goza
en Dios mi Salvador, porque ha mirado la pequeñez de su esclava. Y he aquí que desde ahora me felicitarán todas las generaciones; porque en mí obró grandezas el Poderoso. Santo es su nombre, y su misericordia, para los que le temen, va de generación en generación. Desplegó el poder de su brazo; dispersó a los que se engrieron en los pensamientos de su corazón. Bajó del trono a los poderosos, y levantó a los pequeños; llenó de bienes a los hambrientos, y a los ricos despidió vacíos. Acogió a Israel su siervo, recordando la misericordia, conforme lo dijera a nuestros padres en favor de Abrahán y su posteridad para siempre. Y quedóse María con ella como tres meses, y después se volvió a su casa.

San Mateo 1:18

La generación de Jesucristo fue como sigue: Desposada su Madre María con José, se halló antes de vivir juntos ellos, que había concebido del Espíritu Santo. José, su esposo, como era justo y no quería delatarla, se proponía despedirla en secreto. Mas mientras andaba con este pensamiento, he aquí que un ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu esposa, porque su concepción es del Espíritu Santo. Dará a luz un Hijo, y le pondrás por nombre Jesús (Salvador), porque Él salvará a su pueblo de sus pecados. Todo esto sucedió para que se cumpliese la Palabra que había dicho el Señor por el profeta: Ved ahí que la Virgen concebirá y dará a luz un hijo, y le pondrán el nombre de Emmanuel, que se traduce: Dios con nosotros. Cuando despertó del sueño, hizo José como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su esposa. Y sin que la conociera, dio ella a luz un hijo y le puso por nombre Jesús. Cuando hubo nacido Jesús en Belén de Judea, en tiempo del rey Herodes, unos magos del Oriente llegaron a Jerusalén, y preguntaron:¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto su estrella en el Oriente y venimos a adorarlo.

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San Lucas 2:1

En aquel tiempo, apareció un edicto del César Augusto, para que se hiciera el censo de toda la tierra. Este primer censo, tuvo lugar cuando Quirinio era gobernador de Siria. Y todos iban a hacerse empadronar, cada
uno a su ciudad. Subió también José de Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que se llama Belén, porque él era de la casa y linaje de David, para hacerse inscribir con María su esposa, que estaba encinta. Ahora bien, mientras estaban allí, llegó para ella el tiempo de su alumbramiento. Y dio a luz a su Hijo primogénito; y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en la
hostería. Había en aquel contorno unos pastores acamados al raso, que pasaban la noche custodiando su rebaño, y he aquí que un ángel del Señor se les apareció, y la gloria del Señor los envolvió de luz, y los invadió un gran temor. Díjoles el ángel: ¡No temáis! porque os anuncio una gran alegría que será para todo el pueblo: Hoy os ha nacido en la ciudad de David un Salvador, que es Cristo Señor. Y esto os servirá de señal: hallaréis un niño envuelto en pañales, y acostado en un pesebre. Y de repente vino a unirse al ángel una multitud del ejército del cielo, que se puso a alabar a Dios diciendo: Gloria Dios en las alturas, y en la tierra paz entre hombres de la buena voluntad. Cuando los ángeles se partieron de ellos al cielo, los pastores se dijeron unos a otros: Vayamos, pues, a Belén y veamos este acontecimiento, que el Señor nos ha hecho conocer. Y fueron a prisa, y encontraron a María y a José, y al niño acostado en el pesebre. Y al verle, hicieron conocer lo que les había sido dicho acerca de este niño. Y todos los que oyeron, se maravillaron de las cosas que les referían los pastores. Pero María retenía todas estas Palabras ponderándolas en su corazón. Y los pastores se volvieron, glorificando y alabando a Dios por todo lo que habían oído y visto según les había sido anunciado. Habiéndose cumplido los ocho días para su circuncisión, le pusieron por nombre Jesús, el mismo que le fué dado por el ángel antes que fuese concebido en el seno. Y cuando se cumplieron los días de la purificación de ellos, según la Ley de Moisés, lo llevaron a Jerusalén a fin de presentarlo al Señor.

San Juan 2:1

Al tercer día hubo unas bodas en Caná de Galilea y estaba allí la madre de Jesús. Jesús también fue invitado a
estas bodas, como asimismo sus discípulos. Y llegando a faltar vino, la Madre de Jesús le dijo: No tienen vino. Jesús le dijo: ¿Qué nos va en esto a Mí y a ti, mujer? Mi hora no ha venido todavía. Su Madre dijo a los sirvientes: Cualquier cosa que Él os diga, hacedla. Había allí seis tinajas de piedra para las purificaciones de los judíos, que contenían cada una dos o tres metretas. Jesús les dijo: Llenad las tinajas de agua; y las llenaron hasta arriba. Entonces les dijo: Ahora sacad y llevad al maestresala y le llevaron. Cuando el maestresala probó el agua convertida en vino, cuya procedencia ignoraba, aunque la conocían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al novio y le dijo: Todo el mundo sirve primero el buen vino, y después, cuando han bebido bien, el menos bueno; pero tú has conservado el buen vino hasta este momento. Tal fue el comienzo que dio Jesús a sus milagros, en Caná de Galilea; y manifestó su gloria, y sus discípulos creyeron en Él. Después de esto descendió a Cafarnaúm con su Madre, sus hermanos y sus discípulos, y se quedaron allí no muchos días.

San Juan 19:25

Junto a la cruz de Jesús estaba de pie su Madre, y también la hermana de su Madre, María, mujer de Cleofás, y María Magdalena. Jesús, viendo a su madre y, junto a ella, al discípulo que amaba, dijo a su Madre: Mujer, he ahí a tu hijo. Después dijo al discípulo: He ahí a tu Madre. Y desde este momento el discípulo la recibió consigo.

Apocalipsis 12

Y una gran señal apareció en el cielo: una mujer revestida del sol y con la luna bajo sus pies y en su cabeza una corona de doce estrellas.

Y se enfureció el dragón contra la mujer, y se fue a hacer guerra contra el resto del linaje de ella, los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesús.

NOTA: La Virgen que se menciona en el Antiguo Testamento es Nuestra Santísima Señora, la Virgen María, y Emmanuel es uno de los nombres de Cristo. Cristo significa Mesías y Jesucristo significa que Jesús es el Cristo. Entre los judíos todos los parientes se llamaban hermanos. Jesús no tenía hermanos y por ello, en la misma Cruz, lo vemos confiar el cuidado de su Madre a San Juan Evangelista.

La Santísima Virgen es una joven piadosa llena de virtudes, como piadoso es su Santísimo Hijo Jesucristo y su Santo Evangelio. Madre e Hijo buscan con misericordia la Salvación de todas las almas. El día de la Purificación se realiza una procesión con candelas encendidas en la mano, en memoria del viaje que hizo la Santísima Virgen con el Niño Jesús en los brazos, desde Belén al Templo de Jerusalén, y del júbilo que mostraron los santos Simeón y Ana al encontrarse con ellos. Los padres y madres Católicos deberían, el día de la Purificación, ofrecer sus hijos a Dios y pedirle la gracia de educarlos Católicamente.

Ya lo véis, unos cuestionando y negando el Inmaculado Corazón de la Santísima Virgen, concebida sin pecado, dudando de su Perpetua Virginidad, en contra de su Maternidad Divina, infundiendo en los propios hijos la indiferencia y el deprecio a la Madre del Cielo, para que no la adoren, y escupiendo y blasfemando sobre sus Sagradas Imágenes. Y otros, reparando por esos mismos pecados con el rezo del Santo Rosario.

Ofrecimiento del Santo Rosario: Sirva también este Santo Rosario para desagraviar María a vuestro Santísimo Corazón y al Santísimo Corazón del Señor, y consolaros de los sacrilegios, ultrajes e indiferencias que recibís de los ingratos, y por las 5 ofensas y blasfemias que sufrís: contra vuestro Inmaculado Corazón, contra vuestra Perpetua Virginidad, contra vuestra Maternidad Divina, contra los que procuran públicamente infundir en los corazones de los niños la indiferencia, el desprecio y el odio hacia vos, y contra los que ultrajan vuestras Sagradas Imágenes. Repasad las Letanías, que hemos publicado dentro de nuestra página del Santo Rosario, y comprenderéis que la Santísima Virgen María es la llena de Gracia de Dios.

Aquellos que sugieren un relación de pareja entre Dios Santísimo y María Magdalena, blasfeman contra Dios como perros. El mismo Dios les juzgará por ello.

Plegaria en la Eucaristía que conviene recordar:
En Verdad es justo y necesario, es nuestro deber y Salvación alabarte, bendecirte y glorificarte, Señor, Padre Santo, por el misterio de la Santísima Virgen Madre. Del antiguo adversario nos vino la ruina, pero en el seno virginal de la hija de Sión recibió la vida aquel que nos nutre con el pan de los ángeles, y surgieron para todo el género humano la Salvación y la paz. La gracia que perdimos por Eva nos fue devuelta en María; su maternidad redimida del pecado y de la muerte, se abre al don de una vida nueva, para que, donde abundó el pecado sobreabundara tu misericordia por Cristo, nuestro Salvador. Por eso nosotros, mientras esperamos la venida de Jesucristo, unidos a los ángeles y a los santos, cantamos el himno de tu gloria: Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios del Universo. Llenos están el cielo y la tierra de tu Gloria. Hosanna en el cielo. Bendito el que viene en nombre del Señor. Hosanna en el cielo.

La Mujer revestida del sol es la Santísima Virgen del Rosario de Fátima. El dragón es satanás, que no pudiendo destruir a la Santísima Virgen, decide perseguir a los que guardan los mandamientos de Dios y mantienen el testimonio de Jesucristo, el resto de almas ya están bajo su dominación, ya los tiene esclavos del pecado.

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2ª Carta de San Juan 1:9

Todo el que va más adelante y no permanece en la enseñanza de Cristo, no tiene a Dios; el que permanece en la Doctrina, ése tiene al Padre, y también al Hijo. Si viene alguno a vosotros, y no trae esta Doctrina, no le recibáis en casa, ni le saludéis. Porque quien le saluda participa en sus malas obras.

1ª Carta de San Juan 2:18

Hijitos, es hora final y, según habéis oído que viene el anticristo, así ahora muchos se han hecho anticristos, por donde conocemos que es la última hora. De entre nosotros han salido, mas no eran de los nuestros.

¿Quién es el mentiroso sino el que niega que Jesús es el Cristo? Ese es el anticristo que niega al Padre y al Hijo. Quien niega al Hijo tampoco tiene al Padre; quien confiesa al Hijo tiene también al Padre.

Hechos 7,51

Hombres rebeldes, paganos de corazón y de oídos, vosotros siempre habéis resistido al Espíritu Santo; como vuestros padres, así vosotros.

1ª Carta de San Juan 5:1

Quien cree que Jesús es el Cristo, es engendrado de Dios. Y todo el que ama al (Padre) que engendró, ama también al engendrado por Él. En esto conocemos que amamos a los hijos de Dios: cuando amamos a Dios y cumplimos sus mandamientos. Porque éste es el amor de Dios: que, guardemos sus mandamientos; y sus mandamientos no son pesados; porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo.

1ª Carta de San Pablo a los Corintios 6:9

¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No os hagáis ilusiones. Ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los sodomitas, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los maldicientes, ni los que viven de rapiña, heredarán el reino de Dios. Tales erais algunos; mas habéis sido lavados, mas habéis sido santificados, mas habéis sido justificados en el nombre de nuestro Señor Jesucristo y en el Espíritu de nuestro Dios.

Apocalipsis 21:6

Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin. Al que tenga sed Yo le daré gratuitamente de la fuente del agua de la vida. El vencedor tendrá esta herencia, y Yo seré su Dios, y él será hijo mío. Mas los cobardes e incrédulos y depravados y homicidas y lujuriosos y hechiceros e idólatras, y todos los mentirosos, tendrán su parte en el lago encendido con fuego y azufre. Ésta es la segunda muerte.

Nota: El que recibe a los que enseñan una mala Doctrina se hace cómplices de ellos, y recibirá su mismo castigo, y son muchos los que van cegados por la oscuridad del espíritu del anticristo y beben de su mismo cáliz. Guardad la Doctrina que enseñó el Señor a los Apóstoles, sed depósito de la fe enseñada por Jesucristo.

Siempre han existido muchos que van por delante de Dios y su Doctrina, creen saber más, con sus falsas Doctrinas infundadas, vanidosas y frívolas, pero si os fijáis en la vida de estos, Dios los ha humillado, Dios humilla al que se ensalza, y estos se encuentran verdaderamente lejos de ver y entender la Santa Palabra de Dios y poder obrar con santidad.

Ahora que veis que estos rebeldes falsos Católicos, os han invitado a salir de sus templos, con sus continuas blasfemias, idolatrías, sacrilegios, ultrajes e indiferencias a Nuestro Señor y a Nuestra Señora, al Cielo Santo, tenéis una ocasión magnífica para iros y levantar vuestro templo, en vuestro interior, y ser cada uno de vosotros el Sagrario en el que Nuestro Señor y Nuestra Señora obtengan consuelo y descansen, para lo que fuisteis creados.

Comprometeros ya con vuestro Señor, con vuestra Señora y San José, consagraros ya para una vida eterna con ellos, para esto habéis sido llamados por Dios, aunque muchos no han llegado a entenderlo. Podéis mantener vuestros honestos trabajos, vuestros matrimonios, vuestras familias, y consagraros y comprometeros con Dios, solo así es posible amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a uno mismo, guardando los mandamientos.

Dejad algunos de ser niños en Jesucristo, como dijo San Pablo, y haceros mayores, porque mientras estéis todavía tomando leche espiritual y no comiendo sólido, estáis todavía en las cosas de la carne y no en las cosas del Espíritu Santo. Y dejad ya de tragar todo cuanto pasa delante vuestro, si coméis de aquello que el Señor os ha dicho que no comáis, si coméis de las falsas enseñanzas de la serpiente, moriréis espiritualmente.

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Ritual Católico para bautizar

Un Católico tradicional puede administrar el Sacramento del bautismo a su familia y amigos. Si en el entorno del que va a ser bautizado, no existiera ningún Católico tradicional, puede solicitar a cualquier persona, de cualquier culto, que realice el bautismo, siempre que proceda a realizarlo con la forma y la intención que propone la Santa Iglesia, que a continuación se expone:

Paso previo al bautismo. No es necesario para los recién nacidos. Es indispensable su conocimiento para el resto.

El que va a ser bautizado, a partir de los 7 años de edad aproximadamente y sin límite de edad, a cualquier edad, debe creer en la verdades fundamentales del Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo, trasmitidas por el Magisterio de su Santa Iglesia, y accesibles desde cualquier Catequesis Católica Tradicional.

La Catequesis Católica Tradicional de  TemplodeJerusalen.com  se ofrece para todas la personas, y se ha creado especialmente para facilitar la conversión de las personas desde otros cultos a la Religión Católica. Os conviene, aparte, leáis con frecuencia la Sagrada Escritura y un Catecismo Católico, ambos anteriores a 1958. Aligerar la carga, acudid a vuestro desierto interior, el que tenéis desatendido, acampad allí, Dios os espera, y vaciaros de las fabulaciones, elucubraciones y charlatanería que os rodean, os quitaréis un peso innecesario de encima. Llenaos de Dios en su Santa Palabra.

Con el Sacramento del bautismo, Jesucristo reconcilia al bautizado con Dios, quita el pecado original y le hace miembro de su Cuerpo, componente de su Santa Iglesia e incorporado a la Familia de Dios. El que se va a bautizar, debe realizar una aceptación de la fe Católica: un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo, un único Espíritu, y un solo nombre, el de Jesucristo, para la Salvación de todas las almas.

El Sacramento del bautismo supone un renacer, un volver a nacer, muere el hombre con su pecado original y nace un hombre con una nueva vida en Jesucristo. El que creyera, dice el Señor, será salvo; mas, quien no creyere, será condenado.

Credo de los Apóstoles.
Creo en Dios, Padre Todopoderoso, Creador del Cielo y la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por el Espíritu Santo y nació de Santa María Virgen. Padeció bajo el poder de Poncio Pilato. Fue crucificado, muerto y sepultado. Descendió a los infiernos, y al tercer día resucitó de entre los muertos. Subió a los cielos, y está sentado a la diestra del Dios Padre Todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a los vivos y a los muertos. Creo en el Espíritu Santo, la Santa Iglesia Católica, la comunión de los Santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna. Amén.

Señor mío, Jesucristo.
Señor mío, Jesucristo, Dios y Hombre verdadero, Creador, Padre y Redentor mío, por ser Vos quién sois y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido. Propongo firmemente nunca más pecar, apartarme de todas las ocasiones de ofenderos, confesarme, y cumplir la penitencia que me fuera impuesta.

Forma de bautizar.

Yo te bautizo en el nombre del Padre
(Verter el agua en la frente de la persona, haciendo con ella la forma de la Cruz, y que fluya el agua por la frente)

y del Hijo
(Verter el agua en la frente de la persona, haciendo con ella la forma de la Cruz, y que fluya el agua por la frente)

y del Espíritu Santo
(Verter el agua en la frente de la persona, haciendo con ella la forma de la Cruz, y que fluya el agua por la frente)

El bautizado es santificado y limpiado por el bautismo del agua por la Palabra. Desciende el Espíritu Santo del Señor sobre el bautizado y le abre la puerta de los cielos al bautizado.

Recordad de no abandonar jamás la Palabra de Dios que os ha sido confiada. Si perdéis su Santa Palabra, de la misma forma que el Espíritu Santo os abrió las puertas del cielo en el bautismo, por la fe de vuestros padres cuando eráis pequeños, o por vuestra propia fe con posterioridad, os cerrará las puertas del cielo si renegáis de la fe Católica. Si decís que creéis en el nombre de Jesucristo, pero dudáis y/o rechazáis las verdades fundamentales de su Santa Palabra o dogmas de fe, verdaderamente no creéis en Jesucristo, y sin su Santa Doctrina, las puertas del cielo permanecerán cerradas para vosotros.

Si una vez bautizados, escucháis las falsas enseñanzas del espíritu del anticristo, y os convence de que existe Salvación fuera del Señor Jesucristo, es que habéis apostatado de vuestra fe Católica, y la ira de Dios permanecerá encima de vosotros, porque rechazando el dogma de la fe, le rechazáis a Él, y rechazáis su sacrificio en la Cruz para vuestra Salvación. De igual manera, si el espíritu del anticristo os convence de que uno o varios pecados mortales no son importantes, pecado significa desobedecer a Dios, recordad entonces lo que le ocurrió a Adán y Eva, y en consecuencia a toda la Humanidad, por un único pecado mortal. Si nos os tomáis en serio las cosas de Dios, la condenación de vuestra alma es inevitable.

Carta de San Pablo a los Hebreos 6:4

Porque a los que una vez fueron iluminados y gustaron el don celestial, a los que participaron del Espíritu Santo y saborearon la buena Palabra de Dios y las maravillas del mundo venidero, y a pesar de todo recayeron, es imposible renovarlos otra vez elevándolos a la conversión, ya que ellos por su cuenta vuelven a crucificar al Hijo de Dios y lo exponen a la burla de todos.

Nota: Y acordaos de evitar recibir las enseñanzas de cualquier culto fuera de la Santa Iglesia Católica, especialmente de los seguidores del falso Concilio Vaticano II, ese árbol produce frutos amargos: idolatrías, sacrilegios, profanaciones, ultrajes y abominaciones que ofenden a Dios, hasta un niño de 7 años sabría distinguir la Palabra del Señor y su Santo Evangelio, de esas falsas enseñanzas. El espíritu del anticristo está en este mundo, con su maldad, para dar cumplimento a lo profetizado en la Santa Palabra de Dios, cuando escucháis, que dice tener una Verdad nueva acerca de Dios, una Verdad última y definitiva, diferente a la Verdad revelada por Dios, corred lejos de él, para que no os hagáis cómplices de sus maldades, porque también, sin saberlo, Judas Iscariote, el discípulo de Jesucristo que lo traicionó, con su maldad y posterior condenación estaba dando cumplimiento a la Santa Palabra de Dios, y más le valdría no haber nacido.

San Mateo 7:18

Un árbol bueno no puede llevar frutos malos, ni un árbol malo frutos buenos. Todo árbol que no produce buen fruto, es cortado y echado al fuego. De modo, que por sus frutos los conoceréis.

Nota: Reza diariamente con la Santísima Virgen María el Santo Rosario Católico de 15 misterios con tu familia, y si quieres con tus amigos. Si amas solo a los que te aman, si amas solo a tu familia y tus amigos ¿qué mérito tienes con ello?, también los pecadores aman solo a los que les aman a ellos. Reza diariamente con la Santísima Virgen María y te salvarás tú, y salvarás las almas de muchos.  

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